lunes, 26 de octubre de 2020

La rebelión de los “chalecos amarillos“




 Dicen que la historia social nunca se acaba , menos aún en una sociedad como la francesa , donde la idea de igualdad organiza  la narrativa nacional  desde la revoluciòn  francesa de 1789 . Pilar fundamental  para el desarrollo a posteriori  de movimientos más reivindicativos como el mayo francès de 1968 . Que a su vez sirvió de inspiraciòn para un nuevo movimiento el de los chalecos Amarillos ( Gilets Jaunes ).                                                                                                     

  En noviembre del 2018, un movimiento polìtico irrumpiò en las calles de Francia para protestar contra el aumento de los precios de  los combustibles, para incentivar el uso de vehículos respetuosos con el medio ambiente , decretado por el gobierno de Emmanuel Macron.  Los chalecos amarillos o ( gilets jaunes ) . Nombre con el que se bautizó al movimiento debido a que los manifestantes usaban un chaleco de color amarillo,  que suele utilizar, todo automovilista en caso de incidentes  en una carretera para tener mayor visibilidad . Respaldado principalmente por franceses que viven en la periferia o zonas rurales de  Francia . Se ha convertido en un movimiento de hartazgo contra la politìca fiscal y social del gobierno                                                                                                                                                                                              
 Los  chalecos amarillos  se originaron en las áreas rurales y en las ciudades  de tamaño medio de Francia. Allí  lograron unificar una serie de reivindicaciones sociales , que dieron forma a la primera protesta nacional , el sàbado 17 de noviembre unas  300, 00 personas salieron  a las calles en todo el paìs. Las protestas continuaron por varios días, hasta su clímax, el 1 de diciembre cuando protestaron 136.000 personas, de los cuales 8.000 se manifestaron  en París                                                                                                                                      
  Inicialmente, el presidente Emmanuel Macron había dicho que no daría marcha atrás en el aumento de la tasa de los carburantes, alegando que es necesaria para frenar la contaminación . Pero frente a la intensidad y lo persistente de las protestas  terminó cediendo a las demandas de los manifestantes .                                                                                                                                                     
Para tratar de apaciguar las protesta  su primer ministro Édouard Philippe, anunció la suspensión del aumento de los precios del combustible , que debió entrar en vigor el 1 de enero 2019 durante seis meses .Anunció también el congelamiento del precio de la luz y el gas , durante el invierno , y abandonó un proyecto de ley para endurecer las revisiones técnicas de los coches que pretendía sacar de circulación a los vehículos más antiguos y contaminantes                                                                                                                                 
Pese a las concesiones hechas por el gobierno, los llamados a manifestar continúan , al día de hoy, siendo recurrentes en redes sociales , los portavoces del movimiento, han hecho continuos llamamiento a los franceses  para que se manifiesten en París todos los sábados cerca de los lugares del poder , los Campos Elíseos , el Arco de Triunfo y la Plaza de la Concordia para pedir por mejores condiciones en los salarios de los trabajadores franceses . Dichas protestas han finalizado con enfrentamientos con la policía , y  con  decenas de manifestantes heridos y también algunos fallecidos 

     En conclusión los chalecos amarillos son un movimiento heterogéneo, que no se identifica con ninguno de los espectros políticos (derecha e izquierda), y que ha logrado capitalizar el descontento popular  hacia la élite política gobernante, particularmente hacia el gobierno de Emmanuel Macron y su programa de gobierno ,que ha resultado ser incomprensible  e insuficiente, ya que no ha traído la prosperidad que prometió en su campaña electoral en 2017 para  los trabajadores franceses . No queda claro  cual va a ser el rumbo que va a tomar el gobierno de Macron .Pero lo que si queda claro es que  los chalecos amarillos  se mantendrán en las calles en defensa de sus derechos.


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